Esta me la contó un amigo batería venezolano. Hace años, en su localidad de origen, un militar de escasa formación musical decidió montar una orquesta sin reparar en gastos. En uno de los ensayos dos trombonistas discutían mirando a una partitura, y el militar les preguntó qué ocurría. "Nos faltan dos corcheas aquí", dijeron, a lo que él respondió: "ya les he dicho que todo lo que necesiten lo compren en la ferretería".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Jua ja ja ja, me rei mucho con tu chiste!! Felicitaciones desde Chile.
ResponderEliminarLa ignorancia da cosas como esta, ya sean corcheas o saxofones descuartizados. La pena es que la ignorancia sea la nota dominante en este país.
ResponderEliminarInteresante blog. Jugoso y fácil de leer. No lo abandones.