martes, 28 de diciembre de 2010

Jazznécdota #7: La importancia del contexto

Durante años viví en un barrio obrero de Madrid repoblado en la última década a base de inmigración latina. Me encontraba un día en una famosa hamburguesería de dicho barrio con mi amigo el trombonista mientras discutíamos sobre los errores que estábamos cometiendo al interpretar un tema. En música las notas toman nombres de acuerdo a su duración. Así, una nota que dura cuatro tiempos es una redonda, si dura dos es una blanca, si dura uno una negra, medio una corchea, etc.

El trombonista estaba molesto porque seguíamos sin tocar dos notas negras de la forma adecuada, y no se le ocurrió otra cosa que gritar, en medio de la hamburguesería atestada de inmigrantes ecuatorianos y colombianos: "¡Joder, sólo son dos putas negras!"

martes, 14 de diciembre de 2010

Jazznécdota #6: El contrabajo blanco

A veces no es fácil dialogar con organizadores de eventos, menos aún directamente con clientes. Hay una delgada línea entre la petición aceptable (vestir de negro, interpretar un determinado tema) y la caprichosa. La responsable de contratación de grupos de una empresa, con quien me encontraba negociando precios, me pidió que lleváramos siempre un piano de verdad a las amenizaciones, y no un "organillo eléctrico de esos, que queda muy cutre". No parecía creerme cuando le explicaba que el alquiler y transporte de un piano podía ser bastante más caro de lo que pensaba pagarnos.

Más divertida fue la conversación telefónica de un guitarrista con una clienta que le preguntó "si el contrabajo podía ser blanco". Ni corto ni perezoso, respondió: "¿El músico o el instrumento?".