martes, 21 de febrero de 2012

Jazznécdota #29: Tocas demasiado bien

Hace poco contaba en Facebook un saxofonista que, contratado para amenizar cenas a saxo solo en un restaurante malagueño ("miércoles de jazz"), tras una hora de trabajo la dueña le dijo: "Tocas demasiado bien para este sitio, estás captando la atención de los clientes y esto no nos interesa, además dos de ellos se han quejado de que suene el saxo-jazz, prefieren una música más chill-out de fondo que les permita conversar sin que les moleste".

¿Elogio, reproche, ignorancia o simple falta de vergüenza? Con este tipo de "gestores culturales", por desgracia, tenemos que vernos las caras en más de una y en más de dos ocasiones.